• 2024年04月29日, 週一

    El Sr. Ali Al Ghamdi de Arabia Saudita recibe el Premio Mundial a la Compasión Ejemplar

    Por el Grupo de Premios (Original en inglés)

    “Alá (o Dios) trabaja de misteriosas maneras”, una frase bien conocida usada para explicar a personas extraordinarias o eventos que desafían la creencia. Ali es de esas personas que ejemplifica lo que es un verdadero hijo de Alá; desinteresado, dando de sí mismo o de sus posesiones, compasivo, amando incondicionalmente a todos los ciudadanos del mundo como hermanos.

    Sin ayuda financiera y trabajando mientras para pagar los préstamos que utiliza para sus esfuerzos filantrópicos, Ali apoya a 7.000 huérfanos y a 2.000 familias en las Filipinas, Egipto, Etiopia, Sudán, Kenia, las Comoros, Chad, Nigeria, Uganda y otros países.

    Influenciado por la extrema pobreza que presenció en un viaje familiar a África, el Sr. Ghamdi empezó a donar el dinero que ganaba arduamente a los desfavorecidos de todo el mundo desde los 17 años de edad, viviendo frugalmente y a menudo endeudado. Durante 35 años, cada vez que pagaba un préstamo (cada 4 años), se sacaba otro para continuar su filantropía. Este corazón bondadoso siempre se da como un regalo de Allah, sin esperar nada a cambio. Personificando a un santo, Ali no puede descansar viendo el sufrimiento de los demás; se siente obligado a ayudar en cualquier forma que pueda, poniendo su amor ilimitado en acción no solo financieramente, sino también físicamente organizando los suministros, construyendo escuelas y centros médicos, cocinando, limpiando y enseñando valores morales.

    Ali se inspiró para ayudar a los pobres a partir de las distinguidas obras del filántropo kuwaití Abdul Rahman Al Samit. Él dijo: “Ayudábamos a prepararlos para la escuela y les dimos el apoyo que necesitaban para que se sintieran iguales a sus compañeros en la escuela”.

    Algunos niños que ya se han beneficiado de sus largas y efectivas campañas de fortalecer a los desfavorecidos, están ahora, como adultos, siguiendo sus pasos, convirtiéndose en faros de esperanza para los pobres en sus comunidades, magnificando aún más sus nobles esfuerzos. Por ejemplo, un huérfano ugandés que creció al cuidado de Al Ghamdi fue a estudiar medicina a su país natal, y ahora es un doctor en medicina que tiene la ambición de retribuir a su propia comunidad.

    El 4 de septiembre del 2018, la Maestra Suprema Ching Hai confirió el Premio Mundial a la Compasión Ejemplar y USD$30.000 a Ali Al Ghamdi para apoyar su noble trabajo, con todo el Amor y gratitud en la gracia de Dios.

    Profundamente conmovido por la amorosa bondad de la Maestra, él le agradeció al Cielo por responder sus oraciones. El señor Al Ghamdi ha intentado a menudo adquirir sin éxito, apoyo financiero para su amplia familia, afirmando: “Trato de ayudar a todos en todas partes” y ahora él podrá comprar ropa para sus muchos miles de hijos.

    Agregó:

    “Tengo una oficina muy pequeña en Uganda. Es de solo una sola habitación donde reúno los expedientes de los niños, las escuelas y las familias pobres que les ayudan. Con este premio conseguiré otra oficina en Kenia. Ayudaré a los niños a estudiar y a ayudaré a las personas a desarrollarse por sí mismos cultural, intelectual y profesionalmente. No pude encontrar apoyo, hasta Su generosa contribución, así que cada 4 años pedía dinero prestado del banco para financiar mis esfuerzos humanitarios, sirviendo a los huérfanos y a los pobres”.

    Como parte del Premio Mundial a la Compasión Ejemplar de la Maestra, los siguientes artículos fueron ofrecidos a Ali Al Ghamdi.

    • Carta enmarcada del Premio en inglés y árabe
    • Placa de cristal en inglés y copia laminada en árabe.
    • Libros de la Maestra – Los Nobles Seres Silvestres, Los Perros de Mi Vida, y Las Aves de Mi Vida

    En la gracia de la Maestra, que Ali Al Ghamdi continúe cuidando generosamente de los niños desfavorecidos, nutriéndolos para convertirse en futuros faros de luz, edificando nuestro mundo con bondad.

    Carta de agradecimiento de Ali a la Maestra Suprema Ching Hai (originalmente en árabe)

    Querida Maestra Suprema Ching Hai,

    Por favor permítame presentarle mi más profundo sentimiento de gratitud, agradecimiento, aprecio y respeto.

    Usted me ha dado la recompensa de la misericordia, de la esperanza por un mundo más brillante. Este premio es por el bien de la humanidad y la vida que Alá nos ha concedido, así que debemos cuidarla y conservarla.

    Gracias por hacer feliz a todo el mundo. Todos los niños en África dirán que Alá la bendiga. Compartiré el premio que Usted me ha dado con los niños para que puedan aprender de Su compasión en la escuela.

    Los niños de África y yo deseamos que Alá la bendiga y le dé amor, bondad y que la paz llene Su vida y Su corazón.

    Saludos afectuosos,
    Ali Al Ghamdi

    Fotos de Ali Al Ghamdi del Premio Mundial a la Compasión Ejemplar y algunos de los niños huérfanos que él apoya.